“Quiero contribuir a que haya más referentes femeninos en el campo científico”

Viernes, Febrero 9, 2024


La oceanógrafa Eva Prieto, a bordo del Cornide de Saavedra durante una misión de investigación en 2009
La oceanógrafa Eva Prieto, a bordo del Cornide de Saavedra durante una misión de investigación en 2009.

La oceanógrafa Eva Prieto, asturiana de 39 años y empleada de Predictia desde 2022, se adentró en su campo sin contar con referentes femeninos visibles, algo que compensó el apoyo incondicional de su entorno. Ahora, Prieto se ha involucrado en un programa que ayuda a jóvenes estudiantes a impulsar el desarrollo académico y profesional de estas.

Con motivo del Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia, que se celebra el 11 febrero, la oceanógrafa comparte sus experiencias y opiniones sobre un terreno aún dominado por hombres, en particular según se avanza en los escalafones profesionales.

¿Cuál es tu especialidad científica?

La oceanografía física. Mi investigación consiste en el análisis de la variabilidad hidrográfica del océano profundo (hasta cinco mil metros de profundidad) y de su circulación en el noroeste de la península Ibérica. Para llevarla a cabo, se miden las propiedades físicas del océano (temperatura, salinidad y velocidad de las corrientes marinas) mediante diferentes instrumentos y plataformas de observación in-situ (como barcos oceanográficos, fondeos oceanográficos o boyas). Posteriormente, se analizan estos datos para entender el origen de los cambios observados, contribuyendo al conocimiento del rol que tiene el océano profundo en la regulación del clima terrestre.

¿En qué consiste tu trabajo actual?

En estos momentos trabajo en un proyecto de I+D para el desarrollo de servicios climáticos personalizados que permitan evaluar los efectos del cambio climático en diferentes sectores de la sociedad, como el sector asegurador, la gestión del alcantarillado o la agricultura.

¿Por qué quisiste dedicarte a esta rama científica?

Mientras estudiaba en la universidad, me gustaba la rama medioambiental, y al terminar la carrera surgió la oportunidad de desarrollar mi tesis doctoral en el Instituto Español de Oceanografía. Como crecí en una región costera, siempre me sentí atraída por el mar y también me gustaba la aventura (por ejemplo, subirme en un barco para trabajar).

¿Y tu entorno te apoyó?

Sí, mi familia me ha brindado un apoyo importante durante toda mi carrera profesional, así como mis amistades que, aunque hay quienes no entendían lo que hacía, también me han apoyado siempre.

¿Quienes fueron tus referentes?

Por aquel entonces no tenía referentes femeninos, porque no conocía a nadie que se dedicara a la oceanografía, pero sí puedo decir que mi profesora de Física de la atmósfera en la universidad me ayudó a descubrir este campo de investigación.

¿Has conocido a mujeres de generaciones anteriores que se dediquen al mismo campo que tú? ¿Qué te han contado de sus experiencias, de desafíos que tuvieran que superar?

Sí, y han tenido que lidiar con comentarios acerca de cómo compaginar su maternidad con sus “salidas en barco”. O mujeres cuyas parejas no entendían  lo exigente que es dedicarse a la investigación, sobre todo cuando estás haciendo el doctorado y tienes que estar mucho tiempo viajando, haciendo trabajo de campo, congresos, estancias de investigación…


Prieto, trabajando en su escritorio de la oficina de Predictia
Prieto, trabajando en su escritorio de la oficina de Predictia en febrero de 2024.

¿Qué dificultades has hallado a lo largo de tus estudios y tu carrera con las que tus compañeros no han tenido que lidiar? ¿Alguna vez te has sentido discriminada durante tus estudios y/o trabajo?

No, no me he sentido discriminada en ningún momento durante mis estudios o trabajo por el hecho de ser mujer, ni he tenido dificultades diferentes a las que podían tener mis compañeros. Creo que he tenido suerte y me he encontrado con personas muy majas por el camino.

¿Cómo crees que se podría facilitar el acceso a las mujeres a este tipo de carreras?

En primer lugar, educando en igualdad, tanto en los colegios como en las casas. En segundo lugar, incrementando la inversión en programas de acceso a becas públicas (como por ejemplo las dedicadas a la formación de personal investigador, que en mi caso fue la que me otorgaron), llevar a cabo programas de orientación académica más específicos y con perspectiva de género, talleres y/o actividades dirigidas a incentivar la vocación científica de las jóvenes. Creo que todos estos programas deben promocionarse con lenguaje inclusivo.
Y por último, creo que la mejor forma de facilitar el acceso a las mujeres a este tipo de carreras es dejando que decidan por ellas mismas, sin asignarles ningún rol o comportamiento específico.

¿Qué recomendarías a las estudiantes de ciencias del futuro?

Que sean pacientes, constantes y que trabajen mucho. Porque pueden llegar donde ellas quieran.

Desde el pasado año estás participando en el programa STEM Talent Girl, ¿por qué decidiste involucrarte en él?

Porque quiero contribuir a que haya más referentes femeninos en el campo científico en las que las nuevas generaciones puedan verse reflejadas o pueda ayudarles a descubrir nuevas trayectorias profesionales. La red de apoyo que supone el programa STEM Talent Girl es algo con lo que me hubiera gustado contar cuando era joven y tenía que tomar decisiones importantes en lo referente a mi carrera.


La oceanógrafa, durante la misión de investigación a bordo del Cornide de Saavedra en 2009
La oceanógrafa, durante la misión de investigación a bordo del Cornide de Saavedra en 2009.

¿Qué aportas a este programa?

Mi compromiso y mi tiempo para llevar a cabo las sesiones (una al mes, desde enero a mayo), y para acompañar y guiar a una estudiante en su etapa de exploración de posibilidades para su futuro profesional; apoyo y disponibilidad  para resolver cualquier duda o cuestión que le pueda surgir; mi experiencia, proporcionándole también recursos y herramientas que le puedan servir en esta búsqueda (programas o software que me ha servido anteriormente, referencias en el área de cambio climático, páginas web…)

¿Y de qué manera te beneficias tú?

Tengo la oportunidad de crecer yo también, no solo profesionalmente (adquiriendo habilidades para aconsejar a una chica joven), si no también personalmente, formando parte de una red de mujeres; las sesiones entre consejeras se desarrollan también con una “profesora de mentoras” y en ellas cada una expone sus dudas sobre el proceso de asesoramiento, pide consejos y/o comparte sus experiencias para ayudar a otras compañeras con cosas que le han servido con su alumna.
Además, en el proceso de asesoramiento, el aprendizaje es mutuo. Por ejemplo, el día que nos conocimos, me habló de un libro sobre el universo que yo no conocía.

Un mayor número de estudiantes de carreras científico-técnicas debería reflejarse después en una mayor proporción de trabajadoras en esos campos. ¿A qué crees que se debe que haya menos mujeres que hombres en empresas como esta?

A la complejidad del trabajo que se realiza (relacionado con el manejo de datos, números, matrices, programación, resolución de problemas….); esto es algo que no se alienta en general entre las mujeres, por lo que tienden a decantarse por trabajos menos “técnicos”. También creo que influye la idea que se pueda tener del ambiente de trabajo que hay en este tipo de empresas (habitualmente, con más hombres que mujeres), de que es un trabajo que implica menos interacción humana directa (al contrario que en otros sectores en los que sí predominan las mujeres).

¿Qué crees que hace falta para que se corrija esta situación?

Creo que hace falta mostrar que detrás de la tecnología en realidad hay personas que interactúan, seres humanos que la desarrollan. Y que esa tecnología es útil para la sociedad. Una forma de corregir esta situación sería por ejemplo, ponerle cara a las personas que trabajan en la empresa y que expliquen con palabras sencillas lo que hacen en su día a día. También, hace falta progresar en la igualdad en términos de conciliación laboral y familiar.

Por último, ¿qué metas profesionales esperas alcanzar?

Hacer comprensible toda la información disponible procedente de las proyecciones de modelos climáticos y que la puedan usar quienes así lo necesiten para poder tomar decisiones adecuadas en sus sectores, como por ejemplo, la agricultura.